Los galeses no pudieron repetir sus buenas actuaciones de encuentros anteriores, quizás por el cansancio acumulado, quizás por no haber superado todavía la decepción vivida en semifinales ante Francia. El caso es que sólo al final, cuando ya se vieron con el marcador imposible, fueron capaces de exhibir el juego desenfadado que ha caracterizado el joven equipo galés en esta Mundial. Por el contrario, sin la presión de semifinales, los 'Wallabies' fueron capaces de exhibir su mejor juego, gozando de más balones que en otros partidos y dotándoles a los mismos de mayor dinamismo y alegría que en los duelos precedentes.
Australia: 2 ensayos (Barnes y McCalman), 1 transformación (O'Connor), 2 golpes de castigo (O'Connor) y 1 drop (Barnes)
País de Gales: 2 ensayos (Shane Williams y Halfpenny), 1 transformación (St. Jones) y 2 golpes de castigo (Hook y St. Jones)
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