RESTAURANTE: EL PUCHERO DE MI ABUELA

En el rincón mas inesperado de Madrid puedes encontrar sitios que pueden sorprender, de lo bien que se come. En el barrio de la Arganzuela, he descubierto un bar restaurante donde se come un buen menú del día y sales muy contento.
En la calle Palos de la Frontera 19, esquina a Batalla del Salado (enfrente a la antigüa estación sur) se encuentra “El Puchero de mi Abuela” un restaurante de comida casera muy aceptable en estos tiempos que corren.
Podemos degustar desde fabada, callos, cocido completo a  rabo de toro, codillo e incluso mariscada, eso si de encargo.
Posee una amplia carta de vinos, rioja, ribera del Duero, albariño, rueda, barbadillo, Navarra, Cava o Champagne, además de “castizos” vinos de Madrid, entre ellos el famoso Tagonius.
Luego en barra tenemos una gran cantidad de tapas y raciones.
Tomé un menú del día, 11 € y pude degustar unas patatas guisadas con sepia, donde la sepia se deshacía en boca y la salsa estaba exquisita y de segundo un codillo, que no hacia falta utilizar el cuchillo, tierno, tierno, sin gota de grasa y acompañado de cachelos y verdura, recomendable, mejor dicho muy recomendable.
De postre un flan, casero y por último un café que también entraba en el precio del menú-
La mantelería de hilo, con un mobiliario tipo castellano y el decorado, prácticamente diáfano, con algunas fotos de comida sin marco, muy limpio. Ambiente tranquilo e ideal para familias o amigos.
Aunque cabe destacar el magnífico trato de todo su personal, muy atento y profesional, que hacen que te sientas cómodo y a gusto.