Buena comedia francesa, en la que un tetrapléjico hace una profunda e intima amistad con su cuidador.La idea no es mala, aunque esta poco trabajada.
Philippe,(que le noto un aire a Dustin Hoffman) el accidentado y adinerado protagonista, consigue salir de la rutina de su vida por medio de Driss, el ex convicto asistente, creando una profunda amistad, entre los personajes que son como la noche y el día, compartiendo experiencias divertidas y casi inverosímiles. El resto de personajes son curiosos y, a pesar de su seriedad, resultan ser cómicos, con la complicidad de Driss.
La película transcurre en París y la convivencia entre ambos, desarrolla una película divertida, con escasos tintes dramáticos, sin duda podría haber mejorado aunque tal vez se hubiera alargado el metraje y hubiera sido un poco pesada.
Desde luego la recomiendo si se quiere pasar un buen rato en el cine y salir sonriendo.
1 comentario:
1. El primer objetivo del cine debe ser entretener y más con la que está cayendo.
2. Está basada en un hecho real, por lo que poco más se debe añadir a la historia si se ha seguido con verosimilitud.
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