En Wadiya, país situado al norte de África gobierna Aladeen, uno de los últimos dictadores del universo, tras varias sanciones de la ONU, por no permitir investigar su país, decide viajar a la ciudad que nunca duerme, a dar un discurso de las ventajas de su dictadura hereditaria a la mismísima sede de Naciones Unidas. Una serie de sucesos cambiara su actitud.
Comedia de risa facil, aunque burda y a veces de mal gusto, por las acciones de un tirano sinvergüenza, que gracias a la cultura americana, descubre su soledad, dándose cuenta que el petroleo no lo da todo, aunque ayude.
Poco mas de una hora de risa fácil y absurda, con algún gag genial. Los muy susceptibles el mal gusto no vayan a verla.
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